El tronco del árbol, así como sus hojas, frutos y savia, son venenosos para los humanos. Nunca los toques, ya que pueden causar reacciones alérgicas severas e incluso quemaduras en la piel. Sin embargo, los periquitos y las iguanas adoran los frutos. Las iguanas incluso los tragan enteros.
Importante saber: ¡No busques refugio bajo este árbol cuando llueva!